Meditación en el punto de quietud

Meditación en el punto de quietud

Meditación guiada: Entrar en el punto de quietud

Preparación:

Busca un lugar tranquilo. Siéntate o túmbate con la columna alineada. Cierra los ojos. Deja que la respiración fluya suave y natural.

1. Respiración y enraizamiento

Lleva la atención al aire que entra…
y que sale…
Permite que la respiración se acomode a un ritmo lento y profundo.
Siente el contacto del cuerpo con la tierra.
Imagina que desde la base de tu columna desciende una raíz…
que te conecta con lo profundo, con lo estable, con lo seguro.

2. Recorrido corporal y aflojamiento

Lleva tu conciencia lentamente desde la coronilla hasta los pies,
sintiendo cada parte…
dejando que se relaje…
como si tu cuerpo fuera soltando el peso de lo innecesario.
Siente tu frente… mandíbula… cuello…
Hombros, brazos, pecho… abdomen…
Pelvis… piernas… y pies.

3. Escucha interna del ritmo

Ahora lleva tu atención al interior de tu cabeza…
Imagina que puedes percibir un movimiento sutil, profundo…
como una respiración suave dentro del cráneo.
No necesitas forzarlo. Solo observa.

Tal vez sientes una expansión… y una retracción…
una marea lenta…
un vaivén muy delicado.

4. Invitación al punto de quietud

Y ahora… deja que todo se detenga.
Sin forzar.
Solo permítete entrar en el punto de quietud.

Una pausa.

No hay movimiento. No hay intención.

Solo hay presencia…
un silencio profundo…
como si todo tu cuerpo estuviera escuchando algo más grande.
Quédate ahí… en ese espacio sin tiempo…
donde todo se reorganiza desde adentro.

5. Reconexión con la salud

En ese silencio…
deja que la sabiduría de tu cuerpo trabaje.
No necesitas entender.
Solo confía.
El punto de quietud activa el orden.
La vida se reorganiza en silencio.

6. Salida suave

Cuando lo sientas, permite que el ritmo regrese…
como una ola que vuelve con más fuerza, más claridad.
Siente el impulso vital renovado…
en la cabeza… en la columna… en todo el cuerpo.

Haz tres respiraciones profundas.
Mueve suavemente tus manos, tus pies…
Y cuando estés listo, abre los ojos.

Estás presente. Estás en ti.